Desde el comienzo del encierro, nosotros trabajadoras y trabajadores de la educación hemos tenido que llevar a cabo nuestra misión en un nuevo contexto profesional para el que no estábamos preparados.
Nos organizamos, a pesar de los mandatos contradictorios de nuestros jefes y su incapacidad total para anticipar y garantizar nuestra seguridad. Trabajamos para desarrollar y definir nuestras misiones a pesar de las pautas educativas que a veces caen, como en la Región de París Norte, 3 semanas después del
inicio del encierro, el día antes de las vacaciones escolares. Algunos de nuestros colegas se enfermaron mientras cumplían su misión esencial porque no tenían las protecciones necesarias para preservar su integridad física.
Sin embargo, llevamos a cabo estas tareas a pesar de nuestra jerarquía que voluntariamente ignora las dificultades sociales que enfrentan nuestros alumnos:
- Reclusión en lugares estrechos ya veces insalubres;
- Situaciones catastróficas (aislamiento, insalubridad, hambre) de los jóvenes que dependen de los servicios sociales , ya agotados y sin presupestos desde muchos años;
- Frecuente falta de equipos informáticos y conexión a internet (especialmente en las familias mas pobres en ambito urbano o rural) que permitan mantener una vida social a distancia y mantener un enlace educativo.
Por lo tanto, exigimos que se tomen las siguientes medidas de inmediato:
- Protección del personal que trabaja en establecimientos educativos;
- Aumento de los presupuestos de servicios sociales para permitir una buena supervisión humana de los jóvenes, así como la mejora de su comodidad intelectual y material (compra de alimentos, libros, juegos de calidad);
- Regularización inmediata e incondicional de todos los inmigrantes indocumentados;
- incautación inmediata de nuevos equipos informáticos y llaves 4G para poder equipar a toda la población de forma gratuita, garantizar a todos los estudiantes su derecho inalienable a la educación y permitir que todos mantengan un vínculo social;
- Acceso gratuito a internet inmediato y total para cualquier persona que resida en Francia. Internet debe considerarse como un bien común y un servicio público y debe ser de libre acceso sin condición de recurso y sin identificación previa.
No hace falta decir que estas medidas mínimas vitales tendrán que ampliarse después de la crisis de salud que estamos atravesando
Unos Trabajadores de la educación publica
CNT-AIT - ¡Anarcosindicalismo!